Teniendo en cuenta las características culturales, el uso que se le va a dar a un determinado espacio y las expectativas personales de los usuarios, se puede abordar el proceso de diseño mediante 3 estrategias basadas en el control de ruido, la adición de nuevos sonidos y aspectos que tienen que ver con el diseño visual.
_
Se trata del mecanismo imprescindible para la reducción del sonido no deseado, a los niveles adecuados que hayamos fijado en los objetivos.
Tanto para mejorar la calidad del ambiente sonoro incorporando sonidos positivos, como para producir el efecto del enmascaramiento sobre el sonido no deseado, ya sea superponiendo un objeto sonoro, cómo introduciendo áreas positivas que supongan focos de atracción.
Numerosos estudios han demostrado sobre la calidad de un determinado ambiente está fuertemente influida por su aspecto visual, y pese a que en algunas ocasiones no se pueden reducir niveles sonoros de fuentes no deseadas, teniendo en cuenta la percepción estética también es posible mejorar el grado de satisfacción del usuario.